Entradas

Mostrando entradas de febrero, 2019

Té con lagrimitas

Estaba corriendo para acomodar cosas de la función cuando sonó el teléfono: -¿Dónde estás? -¿Estás bien? -No. Fuimos llegando una a una a abrazarla ayudarla a desanudar el llanto la madeja de ira el dolor injusto No, imbécil No la vas a llamar No le vas a pedir nada No vas a acercarte a la manada nunca más Y alistamos la lavanda la ralladura de limón la cúrcuma Hervimos la tetera Y pienso, ¿cuántas veces nos hemos rescatado ya? No me cabe la memoria Milenios Se me viene la imagen de mi madre y su soledad,  su cargarlo todo sola, su escucharlas a todas a cualquier hora y en cualquier lugar Y mi abuela, con sus dolores de niña-madre encontrando refugio en alguna vecina, alguna prima Pienso en la mamá de Jas admitiendo que nunca quiso tener hijos con la confidencia de quien sabe que no la juzgará En Xime escuchando cada duda, cada recoveco cuando mi confusión se apilaba sobre su llegada y pienso en que a mí me salvar

Berrinche por un queque

Imagen
O Sorece II Antes me caía todo el tiempo. De pequeña dejaron de comprarme lentes porque los pasaba quebrando gracias a mi afición por el suelo. Mi pie, cual pampa guanacasteca, me tiraba hacia el duro abrazo de las aceras, los salones y los patios del mundo para que aprendiera pronto a lidiar con las sensaciones calientes de la pena y el ridículo. Ridícula. Que palabra fea. Como decir sin sentido, pero yo me caía con todo el sentido del mundo. Como cuando me tropezaba en las calles de lastre y me incrustaba miles de piedritas en las rodillas y mami venía a quitármelas una por una mientras yo pegaba gritos. Luego partía una hoja de sábila y me la ponía entera sobre el raspón. La babita le hace bien , me decía y me regañaba porque lloraba mucho: ya no sea ridícula Pero tiene sentido caer cuando está prohibido llorar. __________________ Como a mi mamá, a mi abuela, y supongo que a todas las cocineras de mi linaje, me hiere profundamente el orgullo cuando

Groundhog day / die ewige Wiederkehr

1/2/18 Hace unos años escribí algo: 1/8/14 Que el agua se mueva Que el río cambie y que en ese natural movimiento todo se cambie de lugar El corazón entre los ojos El sexo en medio de las costillas Los pies en los hombros Pero sobre todo, que cambiemos nosotros,  liberados de una buena vez, de aquellos sentimientos que tanto estrago hicieron  y que tan lejos nos llevaron del amor. Hoy facebook me lo recuerda (probablemente porque nos escucha conversar por los micrófonos del celular) y yo nada más quiero regresar al momento en que tenía los pies en el mar sintiendo que el agua se llevaba todo lo que no me gustaba de mí. Ahora me siento en una encrucijada atorada entre l o que creo que necesito, lo que creo que quiero y lo que todavía no puedo... Tan confundida. Tanto que creo que lo único que sé hacer es abrazarme y regresar... 4/2/19 " Zaratustra tiene una visión en la que aparece la figura de un pastor atenazad